VIDEO: Narcomantas en Sonora vinculan a miembros de la Marina y GN con el Cártel de Sinaloa
Al menos dos presuntos integrantes de la Secretaría de Marina Armada de México y de la Guardia Nacional fueron vinculados en narcomantas por su presunta colaboración con los Salazar, célula operativa del Cártel de Sinaloa en Sonora.
Policías de Cajeme retiraron seis lonas con el mismo texto, localizadas en diversos puntos del municipio y donde se implicaba a supuestos miembros de las Fuerzas Armadas con el narco.
Los narcomensajes fueron colocados en puntos estratégicos del espacio público, tales como un puente, una iglesia o una escuela, entre otros sitios de avistamiento general.
En la parte superior de las narcolonas aparecen dos fotografías a color de los supuestos implicados. Mientras que en el resto inferior la acusación está escrita en mayúsculas, sin firma, letras negras y fondo blanco.
Supuestamente, Immer García de la Cruz, Teniente de la Marina y primer Subinspector de la Guardia Nacional en Cajeme, estaría asociado con los Salazar para informarles de operativos en Obregón, Navojoa, Guaymas y Empalme.
Según la narcomanta, este mando incluso recibió de regalo un vehículo Honda Civic, modelo reciente. Presuntamente, el cabo de Marina, Ramón de la Rosa Cruz, sería intermediario entre el teniente y miembros del grupo delictivo.
El Guante, como sería conocido el cabo, operaría como el contacto para recibir pagos de la narconómina de los Salazar. Este grupo trabaja con su brazo armado, Gente Nueva, y sería más cercano a los hijos de Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, quienes son conocidos como los Chapitos.
De acuerdo con reportes locales, los presuntos textos de la delincuencia fueron reportados entre las 05:00 y 07:00 horas del reciente 13 de agosto.
Uno de ellos estaba en el puente de la carretera internacional y 300; otro más en el paso a desnivel de la avenida No Reelección y Sufragio Efectivo, en inmediaciones de la calle General Álvaro Obregón, colonia Centro.
En el cerco de la parroquia el Buen Pastor había otra lona, este centro religioso se ubica en el bulevar Casa Blanca y calle de la Cima, en el fraccionamiento Casa Blanca. Otro narcomensaje estaba en la calle Base, entre Emiliano Zapata y Camino Real, justo en el arco de entrada a la Comisaría de Providencia.
Afuera del colegio Montserrat también estaba otra narcomanta, entre avenida Guerrero y la calle Otancahui. Mientras que en las calles Quintana Roo y Juan Robinson Bours, había una más.
Pero los reportes indicaron que también había otro texto similar en el puente peatonal de calles Náinari y Lázaro Cárdenas, colonia Termoeléctrica, en el poblado de Vícam. Incluso, los informes señalan que esta operación se extendió hasta Empalme.
Quienes colocaron estas lonas las sostuvieron con botellas de agua en esquinas inferiores y amarradas con lazo. En una imagen se aprecia que alguien colgó el narcomensaje en la estructura metálica de una antena. A menudo, rivales despliegan acusaciones para afectar a fuerzas de seguridad, pero en otras ocasiones, sus señalamientos son indicios para investigar colusiones.
Sonora es disputada por cárteles porque representa un punto estratégico para el tráfico de drogas hacia Estados Unidos. Células del Cártel de Sinaloa han tenido una fractura interna por regiones relevantes para sus actividades criminales.
De ese modo, los operadores de Ismael Zambada García, el Mayo, libran batallas contra aquellos dirigidos por Iván Archivaldo Guzmán, Jesús Alfredo Guzmán Salazar, Ovidio Guzmán López y Joaquín Guzmán López: hijos de Joaquín Guzmán Loera y conocidos como los Chapitos.
Apenas el 11 de agosto reciente se difundió un video donde se aprecia cómo presuntos sicarios fueron auxiliados por supuestos policías municipales de Aguaprieta para cometer un secuestro exprés.
En la grabación se observa que una camioneta blanca, tipo pick up, aparentemente persigue a otra unidad de las mismas características. Sin embargo, este segundo vehículo llega hasta donde se encuentra una patrulla con las torretas encendidas.
Tan pronto como arriba la camioneta perseguida, un supuesto uniformado, quien sería policía municipal de Aguaprieta, se acerca y extiende el brazo para abrir fuego. O esto se distingue según la posición corporal y algunas leves detonaciones.
Esta escena fue captada por dos mujeres, quienes tomaron imágenes desde el interior de su vehículo y al momento de escuchar posibles impactos de arma de fuego decidieron estacionarse a la distancia y resguardarse. Presuntamente, los hechos ocurrieron sobre la avenida 12, entre las calles 4 y 5.
La camioneta blanca, presuntamente asediada por sicarios, hace un movimiento en reversa ante el bloqueo de los uniformados. Pero en ese momento, los agresores descienden y rodean a sus posibles víctimas.
Informes extraoficiales indicaron que los policías municipales están ligados a grupos criminales en la ciudad fronteriza con Estados Unidos. Autoridades del municipio como estatales no ofrecieron una respuesta al ser consultadas por el caso.
