Retenes del CDN Los Zetas en Nuevo Laredo ligados a cerca de 100 Desapariciones Forzadas: FBI
Una serie de retenes del cártel del Noreste Los Zetas en la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo se han relacionado con más de 100 desapariciones forzadas, incluido el reciente secuestro de tres ciudadanos estadounidenses. Los retenes se realizan con total impunidad y son parte de una compleja estrategia de inteligencia del cártel que le da a la organización criminal más control que el gobierno de México.
Mediante información de Agentes de Estados Unidos (FBI) que operan en México y que han estado trabajando en el caso de una familia de Texas que desapareció a principios de este mes mientras viajaba desde un pueblo de Nuevo León a la ciudad fronteriza de Nuevo Laredo. La señora Gladys Cristina Pérez Sánchez, de 39 años, viajó con su hijo de 16 años, Juan Carlos Gonzales, y su hija de nueve, Cristina Durán, cuando desaparecieron.
La teoría actual sostenida por las autoridades es que la familia se encontró con un retén del cártel donde se los llevaron miembros del CDN-Los Zetas. Desde principios de año, las autoridades han documentado cerca de 100 casos similares de desapariciones forzadas por parte del CDN-Los Zetas en Nuevo Laredo y sus alrededores.
Autoridades de ambos lados de la frontera revelaron información sobre un complejo aparato de inteligencia utilizado por la facción Cártel del Noreste de Los Zetas para ejercer el control total de sus territorios. La región está bajo el control de Juan Gerardo “El Huevo” Treviño Chávez, actual líder regional de la organización criminal.
La operación de inteligencia utiliza una serie de vigías e informantes ubicados en lugares estratégicos en los territorios del cártel. Esos sujetos llaman por vehículos o actividades sospechosas, a grupos de sicarios que luego responden a esos lugares para interceptarlos.
Luego, los sicarios interrogan a las personas en el vehículo sobre sus identidades, hacia dónde viajan y el motivo de su viaje. Los hombres armados también se han acostumbrado a ordenar a los automovilistas que desbloqueen sus teléfonos celulares y verifiquen su presencia en las redes sociales, así como otra información para verificar sus historias. Los operadores del cártel también tienen la capacidad de clonar rápidamente teléfonos móviles para investigar más a fondo a las personas que han llamado su atención.
La información se transmite a una red central de operadores de radio y teléfono, similar a un centro de llamadas al 911, que tienen una base de datos compleja donde pueden buscar personas, direcciones y otra información.
De gran preocupación para las autoridades es cómo el CDN-Los Zetas ha creado su propia base de datos para control interno que imita una base de datos del gobierno que incluye información oficial como registros de propiedad, información de licencias y otros datos.
